Rebeca Matte, la gran escultora chilena. Por Félix Pettorino y Rafael Luttges.

 Rebeca Matte Bello [Santiago, 29.10.1875 – París, 15.05.1929]. Nieta de don Andrés Bello, es la primera y la más célebre de las escultoras chilenas. Su madre enloqueció al darla a luz, por lo que fue criada bajo la tutela de su abuela materna, Da. Rosario Reyes. Su padre, fallecido en Berlín (1913), fue sepultado junto a su esposa, a raíz de lo cual Rebeca esculpió la estatua titulada Dolor. Llegó a ser profesora de Escultura en la Academia de Artes de Florencia, en la que enseñó a esculpir en mármol y a vaciar en bronce. Sus principales obras son las siguientes: Crudo invierno, 60 cm., bronce (1912); La guerra (1914), Palacio de la Paz, Holanda; Homenaje a los hérores de La Concepción, bronce (1920), instalada en la Avda. Bernardo O’Higgins de Santiago de Chile; Ícaro y Dédalo, unidos en la gloria y en la muerte, 2 m., bronce (1922), Museo de Bellas Artes; Los aviadores, bronce (1923), Plaza Mauá, Río de Janeiro, Brasil; Ulises y Calipso, mármol (1925), Hall del Club de la Unión, Santiago de Chile; El eco, representado por la delicada figura de una doncella que aparece inclinada y con la cabellera mojada, escuchando acaso un sonido lejano de la naturaleza, de 1,48 cms., en mármol; Horacio, 2. m., mármol; Mi hija, mármol; y Dolor, mármol; ambos en el Cementerio General de Santiago. Falleció de la misma TBC que había contagiado a su hijita, muerta unos tres años antes. En 1922 el Ministerio de Educación había creado la distinción Rebeca Matte, en reconocimiento a la escultora más importante y talentosa que registra hasta hoy la historia del arte chileno. (Datos obtenidos de Wikipedia, gracias al buscador Google).

A REBECA MATTE BELLO.

La más célebre escultora

nacida por estas tierras,

su dolor profundo encierra

en sus manos creadoras.

Profesora de Escultura

Academia de Artes, Florencia,

mujer de docta paciencia

que su dolor no sutura.

A sus padres, fue Dolor

la estatua hecha en su memoria,

como símbolo de amor

para elevarse a su gloria,

su obra fue pena y fervor

que se insertó en nuestra historia.