domingo, 12 de febrero de 2012

A un año del viaje eterno de nuestra Inés inolvidable [28.11.2007]. Papá Félix.

Queridos hijos:                                       

Esta “exhibición de informaciones” o “data show”, que por iniciativa de algunos de ustedes les presento hoy, tiene por objeto recordar algunas imágenes y voces ¡tan añoradas! de nuestra amada mamá y esposa Inés, que Dios dispuso se acogiera junto a Él hace justo un año.

        La verdad, sin embargo, es que nada, por muy prolijo y emocionante que resplandeciera ante nuestros ojos, podría reflejar, aunque fuese en un grado mínimo, lo que ella fue, durante más de medio siglo, para cada uno de nosotros. Se trata, pues, de un modestísimo esfuerzo destinado, más que a revivirla parcialmente, a renovar en nuestras retinas y en nuestros corazones su imagen tan querida, y a través de ella, a tratar de imitar su precioso ejemplo a lo largo de la jornada que aún nos resta por vivir.

        “Non omnis moriar” (‘no moriré del todo’) son las palabras con que Horacio, el gran poeta latino, presagió su futuro de persistente memoria después de muerto, lo que, en verdad, puede asegurarse de todas las almas hermosas, como nuestra querida Inés, que logró legarnos, como estela imborrable, un modelo superior de vida.

        ¡Es cierto!: ella vive ahora y vivirá para siempre en nuestros corazones. Será tarea muy ardua imitarla con esa grandeza de espíritu que siempre tuvo ella para con todos los aquí presentes. Haremos el esfuerzo, y ya lo estamos haciendo, con tenaz devoción, desde el instante mismo de su llorada partida...

¡Atesoremos en nuestros pechos, aunque sea una chispa, pero una chispa siempre cálidamente encendida, de lo que ella fue para todos y cada uno de nosotros!

No hay comentarios:

Publicar un comentario